Prepárate para concebir




Desde el primer momento, cuando te plantees ampliar la familia, es importante que pidas una cita con tu médico para que te asesore, antes de la concepción.

Darle a tu bebé el mejor comienzo en la vida significa poner en óptimas condiciones tu propia salud, antes de quedarte embarazada. Un examen físico completo de tres meses a un año antes de empezar a buscar un embarazo, le proporcionará a tu doctor un importante punto de partida para usar de guía durante tu embarazo, y también ayudará a determinar si estás físicamente preparada para tener un bebé.

El preparar tu cuerpo para el embarazo es tan importante como prepararte emocionalmente para este nuevo reto en tu vida. Además, es un proceso que puede tardar, al menos, un año.

Es posible que, en esta visita previa a tu embarazo, tu médico o ginecólogo te harán una larga lista de preguntas acerca de si están tomando algún medicamento, hierbas, suplemento o vitaminas. Querrá saber tu edad, sobre tu salud, estilo de vida, ejercicio físico, hábitos alimentarios, y cualquier posible exposición a riesgos ambientales en tu hogar o en el trabajo (por ejemplo, al exposición a productos químicos).

 Te preguntará sobre tu calendario de vacunas (si te has vacunado contra la varicela y la rubeola, por ejemplo). Si has tenido algún tipo de aborto anteriormente (si has sufrido abortos antes de planear una nueva gestación, el ginecólogo te asesorará adecuadamente sobre esto, ya que puede constituir una dificultad para conseguir un nuevo embarazo), si ha habido complicaciones en partos previos y cosas similares.

Querrá saber si has tenido problemas de ovulación o de menstruación, qué tipo de anticonceptivos estabas usando y te dará la información necesaria antes de dejar de utilizar ese anticonceptivo y cuánto tiempo debes esperar antes de intentar quedarte embarazada.

También necesitarás informarle de cualquier trastorno preexistente, tales como, por ejemplo, diabetes o hipertensión arterial (habrá menos complicaciones durante tu embarazo, si las tienes totalmente controladas) además de cualquier problema genético que haya en tu familia (síndrome de Down, fibrosis quística, etc.).

Por otro lado, te realizará una serie de pruebas para detectar si existe algún problema que pueda dificultar o impedir que te quedes embarazada o que tu embarazo se lleve a término. Algunas de estas pruebas son: una ecografía, citología, pruebas de enfermedades de transmisión sexual, análisis de orina, análisis de sangre, control de la presión arterial, vacunas, control de enfermedades parasitarias y virales.

Algunos de los complementos y consejos que tu especialista puede recomendarte son:

Ácido Fólico: Debes de empezar a tomarlo meses antes del embarazo. La cantidad suficiente de esta vitamina –es la vitamina B9-, es la clave para prevenir enfermedades importantes en tu futuro bebé, como la espina bífida(defectos del tubo neural).

Vitaminas y Minerales: Además del ácido fólico, se necesitan otra serie de micronutrientes esenciales para lograr un embarazo sano, como las vitaminas B12, vitamina D, el yodo o el zinc. Son fundamentales,  si sufres de algún tipo de carencia o si tu alimentación no es lo suficientemente completa y variada. Ten en cuenta, que las vitaminas nunca deben ser sustitutivas de una dieta equilibrada.

Alimentación: Una buena dieta que prepare el organismo para la gestación, es un factor básico para preparar tu cuerpo para la concepción. Desde el momento en el que una pareja  se plantea la posibilidad de concebir un bebé, necesitas una gran variedad de nutrientes para una gestación sana.

Ejercicio Físico antes del embarazo: Es recomendable hacer un deporte de bajo impacto, para lograr tono muscular. Los ejercicios de suelo pélvico están muy recomendados antes y durante el embarazo. 

Recuerda que esta consulta es un magnífico momento para preguntarle a tu especialista todas las dudas y problemas que te puedan surgir, antes de quedarte embarazada.